miércoles, 16 de noviembre de 2011

Análisis de la película Blade Runner


Título: Blade Runner
Director: Ridley Scott
Productor: Michael Deeley
Actores: Harrison Ford, Rutger Hauer, Sean Young, Edward James Olmos, Daryl Hannah
Música: compuesta por Vangelis
Género: ciencia ficción, Acción, Drama
Año: 1982
En medio de escombros y de posibilidades desiertas, Blade Runner nos presenta la interacion entre los humanos y los robots, representada hipotéticamente por el autor como un futuro sucio y sin sentido. Tal vez el hecho de responder nuestras preguntar y tener la capacidad de representarlas llevó a Hampton Fancher y David Peoples a consolidar todo un universo simbólico-Abstracto de lo que posiblemente será el planeta tierra en el 2019.
Partiendo de una base lógica, podríamos mencionar que  el largometraje cumple su función narrativa y compositiva en gran manera, es decir, el universo simbólico-Abstracto que allí se encuentra presente posee la capacidad de ilustrar un futuro bizarro tal vez desde una percepción subjetiva de los autores, pero la manifestación ilusoria lleva al receptor a la critica, a la imaginación, a el convencimiento, a la credibilidad, de que lo que allí se encuentra circunscrito es algo que existe solo en está realidad.
En medio de las constantes angulaciones de cámara, composiciones de planos y adaptaciones del guion, el mundo allí presente se consolida como único y altamente verosímil gracias al papel que desempeña el Director  Ridley Scott en este largometraje. Cabe resaltar que las actuaciones son realmente creíbles, el hecho de que no conozcamos comportamientos robóticos, no quiere decir que no podamos gozar y conocer hipotéticamente está realidad.
Pero que ahí más allá de la percepción actoral, narrativa y estética, hay una fuerza y una energía única que establece y consolida a este largometraje, como la simbolización futurística del hombre viviendo en convivencia con robots, con mucha más tecnología y la capacidad de vivir en otros planetas.
Podríamos entonces mencionar, que observamos muchas cosas en película que cotidianamente son ciertas, las interacciones entre los personajes son alusivas a comportamientos eventuales entre los seres humanos. Existe el odio, el amor, la sensatez, la mentira, la crítica, en está representación futurista de lo real, es un choque entre real y realidad. Este choque proyecta y lleva cada vez más lejos a el receptor a sentirse culpable,  a entender de que por sus malos comportamientos y por su falta de adecuación el mundo será lo que allí se presenta ante sus ojos como audiovisual, con el pretexto de alterar sus sentidos emotivos y culturales. Mientras que sus sentidos son enfrentados, pasan muchas cosas internas en la película, la fotografía como factor primordial genera aquellas atmosferas perceptivas en cuanto a lo real pero chocando con la realidad, es decir percibes algo que no existe con una luz presente que tampoco existe, pero que gracias a la simbolización de está, podrás captar temporalidad, lugares, y estaciones, también podrás entender si hace frio o calor en momento que se genera la acción.

No hay comentarios:

Publicar un comentario